¿Qué hacemos?

En este blog queremos mostrar cómo los partidos políticos utilizan la publicidad en su favor y la imagen que nos venden los medios de ellos.

17.2.08

"Dos maneras de influenciar en el voto"



Ya ganó la fama de "medio manipulativo" el periódico de Pedro J. Ramirez (El Mundo) cuando intentó convencer sus ideas de la relación de ETA en el atentado del 11M. Y esta vez, con las elecciones cerca, no iba a ser menos. Para ello, el medio utilizó dos fotos en portada dos días consecutivos que contrastaban y vendían la imagen que ellos querían de los líderes políticos. En la edición del miércoles 30 de enero, cuatro líderes de las principales potenciales europeas: Sarkozy (Francia), Prodi (Italia), Merkel (Alemania), Gordon Borwn (Inglaterra), posaban junto a José Manuel Burâo (presidente de la Comisión Europea) ante la espera de la llegada de Mariano Rajoy a la reunión. Mientras que en la segunda foto se muestra a Zapatero recibiendo al presidente de Yemen mientras se recalcaba que Zapatero no había sido invitado a la reunión. Así, a modo de indirecta, se dejaba intuir lo que al día siguiente se mostraba de una manera clara.
Con el título "dos maneras de conseguir el voto" a modo de pie de foto, se mostraba a unos sonrientes y felices y sonrientes Sarkozy, Merkel y Rajoy amontonando sus manos en señal de apoyo y unión entre las tres naciones; mientras, que a la derecha de la portada, aparecía Zapatero con un "joven militante de Valdemoro de estética punk" (palabras textual del medio). El mensaje está muy claro: Rajoy estrecha la mano al poder de la prosperidad para buscar una solución a la crisis económica, mientras que Zapatero se preocupa por la sociedad juntándose con jóvenes de "malas pintas" o en establecer relaciones con países secundarios, dejando en segundo plano los problemas económicos.
Por si quedaba alguna duda, el texto al que ilustraba las fotografías aclaraba que era la unión de las tres potencias de la derecha, "la fotografía que hubiera querido Zapatero".
De este modo, este mensaje se junta a la campaña de un Rajoy que intenta convencer de que su partido establecerá la seguridad económica (cuya máxima es la candidatura de Manuel Pizarro como futuro ministro de Economía) que le falta a un país donde abunda la preocupación por un entorno inseguro en economía, y que ha sido infundada ante la exageración de los medios y apoyada por un "estado de resonancia" social (estado en el que la sociedad comprueba la verosimilitud de la realidad que los medios presentan mediante la relación con la propia realidad). Es decir, pequeñas semillas que generarían un cultivo fructífero, según las ideas de Gerbner. O dicho de otro modo, la concepción que está estableciendo Mariano Rajoy es la gratificación (una propuesta de seguridad económica) ante una necesidad (contexto de inseguridad económica).
Entre las palabras que el líder del PP pronunció en su discurso llama la atención su apuesta por una "ley de paridad", que el mismo no cumplió al presentar sus listas electorales y que el Constitucional fue rechazada. Palabras que se sumaron a los temas de inmigración, economía y terrorismo en busca del voto de los 160.000 españoles exiliados en Francia.

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